Aerolíneas mexicanas ceden espacios a compañías de Estados Unidos en el AICM tras la cancelación de rutas

17 de noviembre del 2025

La revocación de 13 rutas por parte de autoridades estadounidenses obligó a reordenar los horarios de operación en el aeropuerto capitalino, favoreciendo temporalmente a aerolíneas extranjeras


Cancelación de rutas y contexto internacional

La decisión de Estados Unidos de cancelar 13 rutas operadas por aerolíneas mexicanas generó un reacomodo inmediato en el sector aéreo. Compañías como Aeroméxico, Volaris y Viva Aerobus se vieron directamente afectadas, lo que provocó un ajuste en su capacidad operativa y una presión adicional en plena temporada de alta demanda.


Reacomodo de slots en el AICM

Tras las cancelaciones, las aerolíneas mexicanas acordaron ceder parte de sus slots los espacios de despegue y aterrizaje en el Aeropuerto Internacional de Ciudad de México. Las compañías estadounidenses fueron las principales beneficiadas de esta redistribución, que se realizó bajo el argumento de mantener la competitividad y asegurar fluidez operativa en el aeropuerto más saturado del país.


Postura del gobierno federal

La presidenta Claudia Sheinbaum expresó confianza en que México y Estados Unidos puedan llegar a un acuerdo técnico que permita resolver el conflicto y recuperar las rutas canceladas. También adelantó que, a partir de 2026, se implementará un sistema digital para administrar los slots de manera más transparente y eficiente, con el fin de evitar futuros desequilibrios.


Riesgos para el sector de carga

Especialistas advierten que el mayor impacto podría recaer en la aviación de carga. La reducción de rutas y la cesión de espacios en el AICM podrían afectar la competitividad de las empresas mexicanas, así como las cadenas logísticas que dependen de ellas. Esta situación podría traducirse en retrasos, mayores costos y una disminución de la capacidad nacional para atender la demanda de transporte de mercancías.


Tensiones diplomáticas y empresariales

La controversia se ha convertido en un tema de peso político entre México y Estados Unidos. La redistribución de slots es vista por analistas como una medida temporal ante la presión del país vecino, mientras las aerolíneas mexicanas buscan evitar mayores afectaciones. El gobierno federal insiste en que trabaja para defender el interés nacional y recuperar el equilibrio en el mercado aéreo.